Los ositos de peluche son un juguete especial para los niños. Desde su creación hace más de un siglo, siguen siendo un juguete emblemático, querido por millones de niños pequeños de todo el mundo. Su aspecto suave y reconfortante lo convierte en el compañero ideal de pequeños y mayores. Los primeros ositos de peluche aparecieron simultáneamente en dos países, Estados Unidos y Alemania. A día de hoy, estadounidenses y alemanes siguen peleándose por su paternidad. He aquí la historia del osito de peluche.
Fue la fundadora de la famosa marca del mismo nombre. Nació en la región de Stuttgart en 1847. Era una joven costurera que fabricaba animales de peluche de fieltro que hacían las veces de juguetes y cojines de agujas. En aquella época, sus productos tuvieron un gran éxito a nivel local. En 1902, su sobrino Richard Steiff le mostró bocetos de osos articulados que había dibujado. Le pidió que fabricara un peluche con forma de oso para niños. Estaba convencido de que sería adecuado tanto para niños como para niñas.
Este primer modelo (el Oso PB 55) era un pequeño peluche de mohair y fieltro relleno de virutas de madera. Al año siguiente, este oso de peluche se expuso en la feria de Leipzig. Hermann Berg, un comprador estadounidense, lo vio y encargó 3000 ejemplares. Esta feria de Leipzig marcó el inicio de la producción en serie. A principios de siglo, este modelo de oso se vendía en un millón de unidades en todo el mundo. Margarete falleció en 1909, sin llegar a ver cómo crecía la popularidad de su modelo para niños.
En 1903, Morris Michtom y su esposa Rose tuvieron la idea de crear un oso de peluche a raíz de una caricatura de Clifford Berryman. Este dibujo, publicado en el diario Washington Star, relataba una anécdota de la vida de Theodore (Teddy) Roosevelt, 26.º presidente de los Estados Unidos. Durante una infructuosa partida de caza, se negó a disparar a un oso atado por los organizadores. Con la autorización del presidente, Morris Michtom bautizó a su oso de peluche con el nombre de Teddy’s Bear, en referencia a esta anécdota. Así nació la famosa colección «Teddy Bear». Gracias a la popularidad del presidente Roosevelt, el éxito fue enorme. Por la misma época, la empresa Steiff también comenzó a producir sus peluches, sin saber lo que estaba sucediendo en Washington.
Desde aquellos primeros osos de peluche fabricados con fibras naturales de mohair, han surgido muchos otros modelos. Hoy en día, también se fabrican con materiales sintéticos, como el poliéster, por ejemplo. Además, presentan una gran variedad de formas y tamaños. Desde ositos que caben en la mano hasta osos grandes que pueden alcanzar el tamaño de un niño. Algunos ejemplares se parecen mucho a los animales vivos, como los osos polares o los osos pardos.
El osito de peluche tradicional sigue siendo hoy en día uno de los más apreciados. Desde su creación a principios del siglo XX, ha pasado por varias generaciones. Sigue siendo muy apreciado por los niños e incluso por los coleccionistas. Algunos son hoy en día muy codiciados. Desde entonces, han aparecido otros osos y ositos, héroes de dibujos animados e historias como Nounours, Winnie, Petit Ours brun, Nounours, Paddington, Colargol y otros Baloo. Estos no han hecho más que confirmar la popularidad de este producto entre los niños.
Desde aquella primera colección con forma de osito, a lo largo de los años han aparecido muchos otros peluches. Hasta llegar a la amplia oferta que conocemos hoy en día en las tiendas. Peluches para bebés con forma de animales, ovejas, conejos, elefantes, personajes de dibujos animados o películas de animación.
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